-El eterno vaso medio lleno,
cuando el agua está a la mitad. Es bueno que valores y te concentres en lo que
tienes (medio lleno) como punto de partida, no en lo que te hace falta (medio
vacío). Utiliza los recursos con los que cuentas.
- Mira más allá de ti, todo lo
que haces es el granito de una montaña universal. El albañil no pone ladrillos
construye hogares; el cantautor no escribe versos, moviliza conciencias; el
cartero no distribuye cartas, es un puente de comunicación; el peón de
carretera no asfalta, traza destinos y viajes.
-Aunque sientas que las tareas que
suponen mejorar son rígidas y monótonas, dale tu toque personal. Crea, propón,
inventa, cambia. Concédete la oportunidad de cambiar algún elemento de las rutinas
convencionales que normalmente realizas. Diseña y explica ejercicios aunque no
seas profesor, prepara un repertorio de aperturas contra ti mismo,…
-En el peor de los casos, cuando te
sientas cansado, desmotivado y harto. ¡Déjalo! No pasa nada. Desconecta. Lleva
a cabo lo que llamamos un “Desentrenamiento estratégico”, vacía tu mente llenándola
con otras actividades y tu motivación pronto se repondrá y volverás con más
ganas que nunca…
0 comentarios:
Publicar un comentario